www.som360.org/es
Blog

Impacto de la interseccionalidad en el estigma asociado a la psicosis

La identidad personal y social puede aumentar el riesgo de discriminación
Regina Vila Badia

Dra. Regina Vila Badia

Psicóloga postdoctoral del grupo MERITT. Unidad de Investigación y Desarrollo.
Parc Sanitari Sant Joan de Déu
Marta Coromina

Marta Coromina Sadurní

Psiquiatra. Adjunta a la Dirección de Salud Mental.
Parc Sanitari Sant Joan de Déu
Hombre con actitud apática

Resumen

El texto discute cómo el estigma asociado a la psicosis se profundiza por la interseccionalidad de factores como etnia, género, estatus socioeconómico y orientación sexual, llevando a discriminación y barreras en el acceso a tratamiento. Destaca la importancia de combatir este estigma mediante educación comunitaria, formación profesional en interseccionalidad, narrativas positivas de las personas afectadas y políticas inclusivas. Subraya la necesidad de una aproximación compasiva que reconozca la diversidad de experiencias para avanzar hacia una sociedad equitativa en el cuidado de salud mental.
Leer másmenos

El estigma asociado a la salud mental es un reto persistente en nuestra sociedad. Cuando hablamos de psicosis, este estigma se hace aún más evidente. Hay una serie de mitos en relación a la psicosis que se han ido perpetuando en el tiempo por desinformación y por la repetición de representaciones con connotaciones negativas desde la industria cultural y mediática. Algunos de estos prejuicios más extendidos hacen referencia a una supuesta peligrosidad, a la falta de recuperación de la persona, o a la culpabilidad de la persona que la experimenta, entre otros.

Mites psicosi

Diez mitos sobre la psicosis

Si a todos estos prejuicios le añadimos otros aspectos del entorno personal y social de la persona como la etnia, el género y la identidad de género o la situación socioeconómica, nos encontramos con que el estigma en torno a esta persona se multiplica y acaba convirtiéndose en un elemento discriminatorio difícil de romper. Estos factores son los que conocemos como la interseccionalidad, es decir, cómo se superponen las diferentes identidades sociales de la persona y cuáles son los mecanismos de opresión o discriminación se activan: racismo, sexismo, fobias diversas (homofobia, LGTBI-fobia, gordofobia, aporofobia, etc.)

En el caso de la psicosis, la interseccionalidad puede amplificar el estigma y agravar las dificultades que afrontan las personas para acceder al sistema de salud con el fin de obtener un diagnóstico, tratamiento y apoyo adecuado; así como para desarrollarse en el resto de sus dimensiones personales, laborales, educativas o sociales con las que desarrollar su proyecto de vida.

El estigma en la psicosis

Las personas con psicosis a menudo son percibidas como «peligrosas», «incapaces» o «irreparables». El estigma, a menudo estructural, pero también social y autopercibido, puede generar aislamiento social, la pérdida de oportunidades laborales y académicas, e incluso maltrato en entornos sanitarios. 

El estigma tiene un impacto directo en la persona y en sus decisiones, ya que la puede disuadir en la búsqueda de ayuda profesional por miedo a ser juzgada o rechazada.

La discriminación no actúa de manera aislada. Las personas con psicosis que también pertenecen a colectivos con vulnerabilidades pueden experimentar múltiples capas de estigma:

  • Origen étnico: algunas comunidades racializadas son menos propensas a recibir diagnósticos adecuados y tratamientos basados en la evidencia. En muchos casos, sus experiencias psicóticas pueden ser desestimadas o mal interpretadas por profesionales que no comprenden sus perspectivas culturales.
  • Género: las mujeres con psicosis pueden ser infradiagnosticadas o etiquetadas erróneamente, mientras que los hombres pueden ser vistos como más «peligrosos» por los mismos síntomas.
  • Pobreza: las personas de contextos económicos desfavorecidos a menudo no tienen acceso a servicios de salud mental de calidad, una situación que perpetúa el círculo de marginación. Esta situación es especialmente delicada en las personas sin hogar, en torno a las cuales todavía hay más falsas creencias que dificultan mucho la comprensión de todo el fenómeno.
     
quiz sinhogarismo

Desmontando mitos sobre las personas sin hogar

Quizz
  • Identidad LGTBIQ+: las personas LGTBIQ+ pueden enfrentarse a estigma no sólo por su orientación sexual o identidad de género, sino también por su salud mental. Esto puede dificultar que encuentren espacios seguros donde hablar o recibir apoyo. 

El impacto en el acceso al tratamiento

Estas múltiples formas de estigma tienen consecuencias reales:

  • Retrasos en el diagnóstico o tratamiento.
  • Acceso limitado a recursos cultural y socialmente sensibles.
  • Mayor probabilidad de sufrir discriminación en instituciones sanitarias o sociales.
  • Aumento del riesgo de marginalización, pobreza y exclusión social. 

Estrategias para combatir el estigma desde una perspectiva interseccional

Romper el círculo del estigma requiere de estrategias que se superponen, a medio y largo plazo, y con diferentes niveles de complejidad porque, tal y como hemos apuntado, el estigma es estructural, social y autopercibido. Hay, sin embargo, un fundamento básico inicial que no se puede obviar en el diseño de estas estrategias: el abordaje de las interseccionalidades. Es necesario, pues, reconocer aquellos factores individuales y colectivos que impactan en la vivencia de la persona, en cómo es percibido por sus conciudadanos y qué dificultades implican con el fin de diseñar proyectos y estrategias que sean efectivas.

A modo de ejemplo, algunas grandes líneas estratégicas que contemplan esta mirada son:

  • La educación comunitaria. Sensibilizar a la ciudadanía sobre qué es realmente la psicosis y desmentir los mitos asociados a estos trastornos. Esto incluye reconocer la diversidad de experiencias según factores como la cultura o el contexto social.
  • Formación profesional. Fomentar la formación en interseccionalidad entre los equipos profesionales de la salud mental, para entender las barreras y necesidades específicas de personas con identidades diversas.
  • Narrativas positivas. Empoderar a las personas con psicosis, en toda su diversidad, a fin de que compartan sus experiencias e historias de superación y resiliencia.
  • Acceso equitativo a los servicios de salud mental. Asegurar que todos los servicios sean accesibles, inclusivos y respetuosos con la diversidad cultural, de género y sexual.
  • Políticas inclusivas. Promover leyes y políticas que protejan a las personas con trastornos mentales de la discriminación múltiple.
  • Empatía y comprensión. Sólo abordando estas intersecciones podremos avanzar hacia una sociedad más justa, donde todo el mundo tenga derecho a ser escuchado, comprendido y cuidado, independientemente de sus circunstancias.