Las redes sociales pueden ser un instrumento para la propagación del fenómeno de la autolesión. Sabemos que existen páginas y videos en las redes sociales que hablan de la autolesión.
Aunque los expertos coinciden en este aspecto, llama la atención en el último estudio de UNICEF el escaso nivel de supervisión que parecen estar ejerciendo madres y padres, no del todo conscientes de su papel como modelo en el uso de las pantallas